Este modelo genera liderazgos juveniles para construir paz en Culiacán y Navolato
Presentamos ante directores de escuelas y funcionarios de la SEPyC nuestro programa Sumando por la Paz, que este año llegará a 60 secundarias de Culiacán y Navolato.
Las y los jóvenes buscan reafirmar su identidad, generar un sentido de pertenencia y reconocimiento social, lo que hace que se expongan a diversos riesgos: trealizar acciones sin medir el peligro, tener el primer contacto con drogas lícitas o ilícitas, o incluso acercarse a grupos delincuenciales a cambio de un aplauso o aceptación.
Iván Velázquez, director de nuestra organización, presentó ante el subsecretario de Vinculación Social de SEPyC, Jorge Rafael Quintero Salazar, en representación de la titular de esa dependencia, Graciela Domínguez Nava, así como directores de secundarias de Culiacán y Navolato, nuestro programa “Sumando por la Paz”, con el que apoyamos y colaboramos con las y los adolescentes para identificar y desarrollar sus propios talentos y capacidades a fin de generar en ellos un liderazgo para la construcción de paz en sus escuelas y comunidades.
“Nuestra comunidad está también ávida de líderes nuevos, visiones distintas a las que tenemos los adultos”, comenta Iván Velázquez.
Añade que, según estadísticas del sistema educativo estatal, a los 14 años muchos y muchas adolescentes abandonan la escuela y en muchos casos su hogar. En los centros de internamiento muchos jóvenes reconocen haber cometido sus primeros delitos entre los 13 y los 15 años.
Con toda su fuerza y energía, conocedores de sus capacidades y sabiéndose líderes, las y los adolescentes son grandes promotores de una cultura de paz en sus escuelas y comunidades.
“Creemos que cada joven que se sienta capaz de emprender acciones de paz lo puede hacer, para ello les ofrecemos herramientas. No hay camino para la paz, la paz es el camino”.
“No pretendemos hacerlo solos, sino acompañados” Todos y todas podemos generar paz: profesionistas, servidores públicos, padres de familia; sin embargo, son las y los jóvenes el presente vivo de la sociedad, por ello es importante que la construcción de paz se desarrolle desde las escuelas, principalmente en las ubicadas en localidades con mayor incidencia delictiva.
“Queremos ser aliados de ustedes en este proceso formativo integral”.
Ante cerca de 60 directivos de escuela y funcionarios estatales, propusimos aplicar nuestro modelo de intervención en sus planteles. Se trata de escuelas de Culiacán, dos de ellas en la sindicatura de Eldorado; así como cinco secundarias en las sindicaturas de La Palma, Villa Juárez y San Pedro, en el municipio de Navolato. El programa llegará a estudiantes de 13 a 15 años.
“La experiencia que hemos encontrado a lo largo de estos años es que, la adolescencia es una edad importante para el desarrollo de las comunidades. Muchas veces no hay programas que los acompañen. A veces están solos. El límite lo van marcando los adolescentes. Son ellos los protagonistas de estas transformaciones”.
El plan de trabajo
Las y los directores firman un acuerdo para hacer equipo, colaborar en el proceso formativo y trabajar en procesos compartidos, lo que se traduce en la reducción de la cantidad de jóvenes que ven la delincuencia como un modelo a seguir y que, en cambio, voltean a ver los liderazgos positivos que tienen en su comunidad, y participan activamente en la construcción de paz a través de la convivencia y diversas actividades que ellos mismos proponen y emprenden.
A lo largo de ocho semanas, las y los adolescentes operan este modelo, acompañados por jóvenes brigadistas, estudiantes de diversas universidades que participan en un esquema de voluntariado.
Súmate por la paz
Nuestro primer contacto con las adolescencias es a través del taller Súmate por la Paz. Consiste en una charla acerca de qué es la paz y cómo se construye:
- Taller educativo. Consiste en una sesión en la que las y los alumnos escuchan acerca de construcción de paz y escuchamos las experiencias e ideas de las y los estudiantes.
- Taller formativo. Es acerca de liderazgos para la paz y la participación ciudadana con alumnos postulados como Líderes de Paz. Son ellos quienes manejan la agenda de actividades de paz.
Los convocamos a sumarse, a activarse y a empoderarse. En estas actividades aplican para convertirse en Líderes de Paz, participar en actividades y poner en práctica toda su creatividad para ejercer su liderazgo.
¿Como ir cambiando el chip de los jóvenes?
Miguel Calderón Quevedo, Presidente del Patronato de Suma, indicó que se ha llegado a un gran número de adolescentes en secundarias de Culiacán y ahora también llegará a más escuelas de Navolato, y no sería posible sin el compromiso de las y los integrantes de esta organización, pero principalmente con el apoyo y voluntad de las y los directivos en las escuelas.
“Hoy el reto es del doble. El equipo en pandemia llegó a ser de 7 personas. Hoy estamos listos con 15 personas, con mucho talento y vocación, y multiplicados con brigadistas, con las y los directores en las escuelas, podemos ir cambiando ese chip. Se trata de un futuro de paz en beneficio de las y los jóvenes”, dijo.
¡Un gran equipo!
Directores y representantes de las escuelas participantes en este programa externaron los logros que las y los estudiantes han alcanzado. En representación del director de la escuela María de Jesús Jacobo Gastélum, la maestra Laura Barraza dio un ejemplo de lo ocurrido en su plantel.
“Hicimos un gran equipo. Yo vengo de la escuela en la que tenemos niños que han sido corridos de varias escuelas y hemos tenido Líderes de Paz que han ganado algunos premios; ahorita uno de ellos está en un concurso del Ayuntamiento. Uno de ellos está desarrollando un chaleco para invidentes. Buscamos ahora patrocinios para que ese chaleco lo pueda usar alguna persona invidente”, comentó.
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